lunes, 2 de abril de 2012

Juan Pablo II el Grande


A siete años de su partida a la Casa del Padre Celeste, sigue siendo fuente de inspiración para mi vida personal. Juan Pablo II el Grande, el inolvidable papa. Ahora Beato y si Dios quiere Santo proximamente reconocido también por la Iglesia Militante. Cuanto lo quise y cuanto lo quiero todavía. Nunca estreché su mano. Más siempre supe que me llevaba en su corazón y yo lo llevaba en el mío. Nuestro "Amado Papa" decía Benedicto XVI cuando como cardenal celebraba la misa de cuerpo presente. Nunca te olvidaré. Es más esperamos verte pronto en los altares y luego en el cielo. Nos apartarás un lugar a muchos, creo yo; de los que ya preparó nuestro Señor. Mientras ese momento llega, ayúdanos con tu intercesión delante de Cristo y La Virgen María.

No hay comentarios:

Publicar un comentario